jueves, 24 de marzo de 2011



Ya perdoné errores casi imperdonables, tratè de sustituir personas insustituibles, de olvidar personas inolvidables.


Ya hice cosas por impulso, ya me desepcioné con algunas personas, y cuando pensé no desepcionarme; también yo desepcioné a alguien.


Ya abracé para proteger, ya me reí cuando no podía, ya hice amigos eternos, ya amé y fui amada, ya fui amada y no supe amar.


Ya grité y salté de felicidad, ya viví de amor e hice juramentos eternos, (pero también los he roto, y muchos).


Ya lloré escuchando música y viendo fotos, ya llamé sólo para escuchar una voz, ya me enamoré por una sonrisa.